¡Tenemos un regalo para ti!

Tips para mantener mayor tiempo tus frutas y verduras

  1. Frutas y verduras refrigeradas

No todos los vegetales se conservan mejor en frío, sino que algunos pueden ver afectado su sabor y textura, por lo que es mejor conservarlos a temperatura ambiente. Por ejemplo, el zapallo, el jengibre, las papas, los tomates, las cebollas, el ajo, el calabacín o las berenjenas

Lo que sí debes refrigerar son los champiñones y setas, alcachofas, zanahorias, apio, lechuga, remolacha o rábanos. En caso de las platas, debes refrigerarlas solo cuando estén muy maduras.

  1. Lavar todo antes de meterlo en la nevera

Aunque esto parezca obvio, es necesario precisar que las hortalizas deben ser lavadas antes de entrar a la nevera, porque llegan del mercado y se acumulan bacterias. Es recomendable esperar a que se sequen luego de ser lavadas ya que toda la humedad residual puede provocar el crecimiento de bacterias, moho y, por tanto, el desperdicio alimentario. Con respecto a las papas, es recomendable mantenerlas un buen rato bajo el agua.

En el caso de los champiñones, la sugerencia es sumergirlos en un bol con agua antes de enjuagarlos en agua y secarlos después con papel de cocina.

  1. La temperatura

Si la temperatura cambia o se rompe la cadena de frío, es posible que surjan los microbios. Hay que intentar que no pase mucho tiempo desde que compras los alimentos hasta que los metes en la nevera, sobre todo si son congelados, para que no ocurra esto. La temperatura de los refrigeradores no debe superar los 4 grados centígrados. En el caso de las verduras, las frutas y las hortalizas, la temperatura no debe bajar de 0 grados.

  1. Tapa las sobras

Para evitar encontrarnos con los alimentos que hemos dejado a media llenos de moho o en pésimo estado, lo recomendable es guardarlos en tarros de vidrio transparentes y debidamente señalizados, o en los tapers herméticos que podemos encontrar en los supermercados.

  1. Coloca los alimentos donde corresponde

En la zona más fría del refrigerador se deben guardar alimentos delicados como el pescado y la carne, que necesitan más frío.

En los cajones es ideal guardar las frutas y las verduras, cuya temperatura de conservación no debe bajar de 0 grados. Si las compraste en un paquete, sácalas de la bolsa porque en ella se humedecen y se estropean antes.

En la parte media o la puerta, que suele tener una temperatura de 4 o 5 grados, van los alimentos que requieren menos frío, como los lácteos, huevos o alimentos envasados.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Secciones